This is 2020.

¿Te ha pasado que cuando ves a una persona a lo lejos caminar hacia ti intercambian un par de miradas y, justo en el momento en el que pasan una junto a la otra, ambas voltean a ver hacia otro lado? ¿Sabías que hay un nombre científico para eso? Eso lo leí hace ya un par de años en algún lugar de la web. O quizá lo escuché en una charla TED. Honestamente no lo recuerdo. Lo que quiero decirte, es que no pienses que tus problemas son únicos. No tienes por qué empezar de cero. Hoy en día hay estudios serios sobre prácticamente cualquier situación a la que te enfrentes. Desde aprender a ser un mejor conversador hasta el por qué no logras tener relaciones significativas. En serio. Hay mucho contenido allá afuera para tipos “raros” como yo a los que nos encanta leer sobre casi cualquier situación social (y de cualquier tipo) a la que nos enfrentamos. El problema es pensar que los problemas a los que nos enfrentamos son únicos. Y que nadie, en los más de dos mil años que tenemos en el mundo como especie, se ha enfrentado a algo similar. Hay que utilizar el internet como lo que es, la mayor fuente de información en el mundo. No tengo por qué recordarte la importancia de desarrollar un criterio para discernir entre toda la información que está ahí afuera. Y si no sabes cómo, ahí mismo encuentras la respuesta. Deja de pensar que el internet sólo es Facebook o YouTube. O que sólo sirve para hacer el “copy paste” de tus trabajos de la universidad. Estás desperdiciando el trabajo de grandes mentes al que puedes acceder con sólo un par de clics. Adquiere el hábito de Googlear cualquier situación que esté golpeando tu cabeza. No tienes que reinventar la rueda. No tienes que inventar la cura para olvidar a tu ex. Todo está ahí afuera. Y estoy de acuerdo con la frase que dice que cada quien tiene que pelear sus propias batallas. Pero si vas a pelear, es mejor hacerlo con las mejores armas. Tú las tienes todas a tu alcance. La época donde sólo los reyes tenían acceso a la información ha terminado. This is 2020, baby.

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